Trànsit revisará el número y la ubicación de los radares

15 de febrero de 2011
  • Puig duda de "la bondad" de algunos dispositivos porque pueden atender a razones recaudatorias, crear peligro e incluso causar contaminación.

Después de la supresión del límite de 80 km/h –ya sin el anticiclón que mantuvo elevados los niveles de contaminación la semana pasada, comenzó a aplicarse ayer en la C-31 sur y C-32 sur y hoy llegará a la C-31 norte-, vendrá la revisión de los radares. Lo anunció ayer el conseller Felip Puig, que ha encargado al Servei Català de Trànsit un replanteamiento del número y de la ubicación de estos dispositivos porque, a su juicio, no está claro que todos tengan la vocación de mejorar la seguridad. En cambio, lamentó el titular de Interior, parece que sí buscan “martirizar la conducción” y en algunos casos “incrementar la recaudación”.
“Los radares deber ser instrumentos para hacer cumplir las normas pero, sobre todo, para la mejora de la seguridad vial”, subrayó el conseller en declaraciones a RAC 1. Por ello, Puig ha pedido “al nuevo director del Servei Català de Trànsit ( Joan Aregio) un replanteamiento del número de radares, su intensidad y, sobre todo, su bondad”.

Barcelona. Redacción

 

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